El servicio doméstico en los domicilios de miles de familias en España se ha convertido en un pilar fundamental para el funcionamiento de los hogares. Ya sea para el cuidado de niños, la limpieza del hogar, el cuidado de personas mayores o cualquier otra tarea, los empleados de servicio doméstico forman parte integral de la vida de muchas familias. Por todo ello, es primordial lograr que la colaboración y la convivencia entre los integrantes de la familia y el personal que trabaje en el domicilio sea armoniosa y que el trabajo pueda ser desarrollado de manera efectiva y adecuada para el buen funcionamiento del hogar. Con el objetivo de poner algo de luz y dar unas pequeñas pinceladas de aquellos puntos sobre los que debe construirse esta relación laboral tan particular, os proponemos a continuación los puntos que consideramos indispensables para que todo fluya en la casa.
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Comunicación abierta y clara entre empleador y empleado
En la base de toda relación que funcione bien está una correcta comunicación entre los implicados. Establecer un canal de diálogo abierto y claro entre el empleador y el empleado es esencial. Dedica tiempo para hablar con tus empleados domésticos y escuchar sus opiniones y preocupaciones en lo que concierne a la casa y la relación con los miembros de la familia. Fomenta un ambiente donde se sientan cómodos expresando sus pensamientos y necesidades y esto revertirá en un mejor desempeño y cuidado por las personas que viven en el domicilio.
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Establecer Expectativas Claras
Desde el inicio de la relación laboral, es importante definir claramente las responsabilidades y las expectativas que tiene el empleador sobre el trabajo a realizar. Asegúrate de que independientemente y de manera complementaria a lo que tengáis pactado por contrato, los pormenores de la relación laboral y lo que se espera del empleado queden claros desde el principio, para que no se produzcan posteriormente malentendidos que puedan llevar a conflictos desagradables entre las partes.
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Resolución Constructiva de Conflictos
Los desacuerdos son inevitables en cualquier relación y obviamente también dentro de la relación laboral con tu empleado de servicio doméstico, pero es crucial reconocer cuando éstos se producen y abordarlos de manera constructiva. Cuando surja un conflicto, trata de entender las preocupaciones y demandas de tu empleado y tratad de buscar soluciones juntos que puedan satisfacer a ambas partes, dentro de un orden.
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Reconocimiento y Aprecio
El reconocimiento y el aprecio son poderosas herramientas para fortalecer las relaciones laborales. Celebra los logros y muestra gratitud por el trabajo bien hecho de tu empleado de hogar. Este agradecimiento se puede demostrar mediante elogios, explicitar la puesta en valor del trabajo, premios, etc.. Cualquier actuación que haga sentir a tus empleados valorados fortalecerá su compromiso y motivación con su trabajo y los integrantes de la casa.
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Trato Justo y Respeto Mutuo
Trata a tus empleados domésticos con respeto y dignidad en todo momento. Asegúrate de que se sientan valorados como miembros importantes de tu hogar. Respeta sus derechos y privacidad, y establece límites claros entre el espacio personal y laboral.
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Cumplimiento de la normativa laboral
Cumplir con el estatuto de los trabajadores y resto de regulaciones asociadas al servicio doméstico es condición indispensable para poder construir una correcta relación con tu empleado de hogar. Esto incluye el respeto al salario mínimo, las horas de trabajo pactadas, los descansos laborales o cualquier otro derecho o beneficio laboral que corresponda al trabajador. Mantener una relación laboral dentro de la legalidad es fundamental para la confianza mutua entre empleador y empleado.
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Un hogar seguro para trabajar
La seguridad en el trabajo es una prioridad. Proporciona un entorno de trabajo seguro e informa sobre las posibles áreas de mayor riesgo en el hogar donde deba prestarse una mayor atención para velar por la seguridad de tu empleado. Esto incluye la identificación y mitigación de riesgos en el hogar.
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Feedback Constructivo
Proporciona retroalimentación regular sobre el desempeño y el progreso de tu empleado de hogar. Esto le ayudará a mejorar y a mantener su nivel de satisfacción en el trabajo. Fomenta un ambiente donde puedan sentir que aportan a la casa, que su trabajo tiene sentido y valor.
En conclusión, construir relaciones armoniosas en el servicio doméstico es fundamental para crear un ambiente de trabajo agradable y motivador. La comunicación abierta, el respeto mutuo y el cumplimiento de la normativa laboral son claves para una relación gratificante entre empleadores y empleados domésticos. Esta pequeña guía te ayudará a tener en cuenta esas áreas en las que hay que prestar especial atención para que la relación laboral sea duradera y provechosa para ambas partes.